Por Andrés Rabossi
Si la política fuera un reality show, el casting para gobernador de Corrientes 2025 ya estaría
abierto. Pero ¿qué busca hoy la sociedad correntina en su próximo líder provincial? Spoiler:
no es más de lo mismo. Los correntinos no quieren un gobernador de manual, sino alguien
que conecte con las demandas del presente, que sea cercano y, sobre todo, que traiga ideas
frescas bajo el brazo.
Cercanía y autenticidad: adiós al líder inalcanzable
El político de traje gris, encerrado en oficinas y rodeado de asesores que no pisan la calle, ya
no tiene lugar. Hoy, la gente quiere un líder que no solo hable, sino que escuche, que camine
los barrios y entienda las necesidades reales de la gente. Alguien que converse en la feria,
compre un chipá y no finja saber qué pasa solo porque leyó un informe.
Recambio generacional: el poder no se hereda
Ya basta de figuras recicladas. El 2025 necesita caras nuevas, con ideas que representen a
las nuevas generaciones. La política, como el fútbol, no puede quedarse con los mismos
jugadores eternamente. Es hora de abrir el banco de suplentes y darles protagonismo a
jóvenes con ganas de cambiar las reglas del juego.
La gente no vota al hombre invisible
La sociedad necesita conocer a quienes aspiran a liderar. No se vota a alguien cuyo nombre
no se reconoce, cuyas propuestas son un misterio y cuyos antecedentes se ignoran. El
candidato del futuro debe mostrarse, comunicarse con claridad y ofrecer soluciones
concretas a los problemas de la gente.
La sociedad cambió, ¿y los políticos?
Los políticos deben adaptarse a los nuevos tiempos. Eso implica desarrollar habilidades
para formar y liderar equipos de trabajo, mantenerlos motivados y comunicarse de manera
asertiva. Además, necesitan planificar estratégicamente, saber escuchar y gestionar con
transparencia. Sin esas herramientas, el cambio queda en un discurso vacío.
Equipos de especialistas, no amigos del poder
¿Sabían que los gabinetes pueden estar formados por personas idóneas? Increíble, pero cierto. Es hora de dejar atrás los acuerdos políticos donde cada ministro y secretario son un premio por lealtad partidaria, o para familiares y amigos. Lo que la sociedad espera es un equipo de especialistas: profesionales que sepan lo que hacen en áreas como salud, educación, economía y ambiente.
Un liderazgo horizontal: adiós al ‘yo mando y ustedes obedecen’
El gobernador del futuro no puede ser un jefe autoritario que concentre todas las decisiones. Necesitamos un liderazgo horizontal, donde el diálogo sea la herramienta principal y las decisiones se tomen escuchando a todos. Si algo dejó claro la pandemia es que un solo cerebro no puede hacerlo todo.
¿Qué quiere Corrientes?
Los correntinos, al igual que el resto del país, están cansados de líderes que prometen todo y cumplen poco. El próximo gobernador debe entender que su mandato no es un trono, sino una responsabilidad. Alguien capaz de armar equipos sólidos, priorizar el conocimiento sobre los favores y estar dispuesto a innovar.
¿Están los partidos listos para ofrecer este perfil? Si no, que se preparen para seguir participando.